miércoles, 7 de mayo de 2014

Snowman en García de Sola.

Impresionantes estampas pudimos captar durante el primer evento del año que el Club Snowman Carpfishing organizó para sus miembros. Un gran ambiente reinó durante los estupendos días que pasados entre compañeros y amigos que en muchos casos hacía tiempo no nos veíamos, y todos nos encontrábamos deseosos que llegara este momento.



Snowman Carpfishing está formado por pescadores de diferentes partes de la geografía, y eso hace que por diferentes motivos como: compromisos laborales, falta de tiempo o la distancia, no tengamos la posibilidad de reunirnos tanto como nos gustaría, así, que estos acontecimientos que organiza el club son la mejor escusa para volver a reencontrarnos y pasar unos días juntos.
Con el fin de reunir al mayor número de miembros de este equipo de pescadores que disfrutan fervientemente de este gran hobby, escogimos una fecha mirando favorecer la asistencia del mayor número de socios al evento, pero… como dice el refrán, nunca llueve a gusto de todos, y por desgracia hubo compañeros que no pudieron asistir al concurso, pero nos acordamos de ellos más de una vez.
Es un tópico hablar del gran ambiente que se respira en este tipo de eventos, y a riesgo de caer en ello, es algo que hay que realzar.
El concurso.
El escenario elegido para este evento fue el embalse de García de Sola, más concretamente en la zona de
Peloche. Uno de los grandes embalses Extremeños lleno de vida, belleza y personalidad, porque de verdad que es de esos escenarios que enamoran. Este embalse es un lugar idóneo para acontecimientos de este tipo por lo espacioso y productivo que suele ser, aunque no proporcione grandes capturas, siempre ofrece el aliciente de un buen número de ellas para hacer muy entretenidos los días que pasas junto a sus orillas.
Como es habitual en los eventos que organiza el Club Snowman Carpfishing para sus componentes, las zonas del concurso estarían sujetas a unas estrictas normas de ubicación y delimitación, con el fin que no pudiera haber suspicacias en el resultado final, porque el espíritu competitivo en estos concursos es formidable por parte de los pescadores, haciendo alarde de trabajo, constancia y empeño para intentar alcanzar la gloria de conquistar el disputadísimo puesto de campeón que lo encumbrará para siempre en el Olimpo de los idolatrados por todos los demás compañeros. Por eso, la vigilancia de unos competidores a otros era continua para que no utilizarán espacios fuera de los márgenes previamente marcados, franjas que dividieron la zona de pesca en veinte puestos asignados por riguroso sorteo. El viernes dio comienzo la esperada competición y los pescadores pudieron descargar todo el estrés acumulado durante los días precedentes a la misma. La excitación de los pescadores era palpable cuando se inició el cebado de puestos, y entonces fue cuando afloraron los nervios. Comenzaron las voces de unos a otros diciéndose de todo: - ¡Oye!, ¿montamos aquí un campamento para estar juntos?. – Vale, ahora llevo las neveras. Grandes neveras cargadas de fresca bebida acompañaban a otras repletas de todo tipo de alimentos. Y así es como comenzó el concurso Snowman. Je je je
Todos los participantes se reunieron en tan solo cuatro puestos, eso sí, dejando espacio suficiente entre ellos para que no se estorbaran al pescar. Se creó la zona común en el puesto más céntrico para todos y allí, bebimos, comimos, charlamos, reímos… porque esa es la esencia que busca Snowman en sus eventos, un lugar donde haya cabida para todo, incluso para pescar, que es algo que en ocasiones conseguimos. Y es que esto está pensado para estar con la gente que normalmente no tienes oportunidad de hacerlo.
Y… ¿problemas de avituallamiento? – Por favor, la duda ofende. A riesgo de que me llamen exagerado, posiblemente habría suficientes víveres para pasar dos semanas allí sin necesidad de buscar abastecimiento de ningún tipo. Bueno, quizás haya exagerado un poco y no había para dos semanas, sino, para doce días. Y es que los concursos que organizamos en Snowman Carpfishing son reuniones entre compañeros para poder pasar unos días juntos disfrutando de una afición compartida, además de compartir todos esos momentos que implica una reunión de buenos amigos.
En relación a la pesca.
Aunque lo principal para nosotros es disfrutar de la compañía, no olvidamos que también vamos a estos escenarios para pescar, o al menos intentarlo. Y en este aspecto, hay que destacar que tampoco se escatiman recursos para conseguir el mayor número de capturas posibles, consiguiendo incluso buenos resultados en algunos casos. Porque en Snowman, aunque no lo parezca, hay muy buenos pescadores.
El primer día en estos casos es siempre de convivencia y eso fue lo primero que se hizo una vez organizado cada uno de los campamentos que se montaron. Una reunión para cenar después de haber tomado un aperitivo fue el preludio de una amena velada en la que se fraguó, entre cafés y algún licor, una especie de competición entre los cuatro puestos que se formaron, creándose un pequeño pique para ver quién conseguía más peces, algo que solemos hacer entre nosotros con toda la sana intención, pero que si tenemos la suerte de ganar, utilizamos la más mínima escusa para recordárselo a los compañeros.
Ya había un motivo para poner todos los sentidos en la función de pescar, y los resultados no se hicieron
esperar mucho. Las capturas se sucedieron para todos los presentes durante esa primera noche del encuentro, en la que se destacaron por el número de ellas el grupo que formaban los que denominaremos los Carlos, nombre tomado porque hay varios compañeros que se llaman así, que por casualidad se habían agrupado en este equipo. Pero la competición entre los grupos era meramente simbólica y únicamente servía para amenizar aún más el tiempo que pasamos en este escenario. Aunque no perdían ocasión de recordar a los demás que estaban pescando más que ellos.
Los siguientes días continuaron con la tónica inicial, los Carlos seguían destacándose en el número de capturas, y el resto de participantes, aunque en menor número, también conseguía llevar carpas hasta sus moquetas. Como ya comenté anteriormente, no es un escenario propicio para conseguir grandes ejemplares, pero entre todas las carpas que se consiguieron hubo algunas que destacaron sobre las demás, alcanzando pesos superiores a los siete kilos.





El momento más destacado del concurso fue cuando un nuevo miembro del Club, en este caso una fémina, en la que era su primer pez en esta modalidad y en su primera cita en un evento de este tipo, conseguía alzarse con el título de campeona al conseguir el pez de mayor tamaño hasta el momento, y que a la postre, a pesar que en el transcurso de la sesión hubo otras capturas de tamaño similar por el resto de compañeros, esta la galardonó y alzó a lo más alto del podio del evento, y como se suele decir, mojando la oreja a todos.


Pero como todo en la vida, el primer concurso del año de Snowman Carpfishing llegó a su término, y a pesar de los buenos y agradables ratos que pasamos todos juntos, esa mañana las caras ya no reflejaban tanto entusiasmo como el primer día, había llegado el momento de recoger y poner rumbo a casa dejando atrás un fin de semana de compañerismo, pesca y dicha en el que se había reforzado más aún la amistad entre todos. Poco a poco cada uno cargó su coche y apocado fue despidiéndose del resto de participantes antes de emprender el viaje de vuelta. Pero llegarán más eventos similares a lo largo del año para poder volver a disfrutar de una nueva sesión en la orilla de algún embalse, donde se volverá a revivir el ambiente que reina en estos acontecimientos tan esperados por todos los que componemos este gran Club.
Snowman Carpfishing

2 comentarios:

  1. Que bueno el tener un grupo tan sano y disfrutar de el, Bravo....

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  2. Que bueno el tener un grupo tan sano y disfrutar de el, Bravo....

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