Con algo de retraso
debido a diversos quehaceres ineludibles, hoy podemos al fin, reflejar en estas
líneas lo acontecido en el último punto caliente que nos quedaba pendiente de
comentar referido a las diferentes salidas de pesca en las pasadas fiestas de
Semana Santa. En este caso se trata
de las andanzas del maestro Revi, un afortunado que probó suerte en distintos
días a lo largo de la semana, y que contó con la visita de varios aprendices
que lo vamos visitando cada vez que nos es posible para ver si aprendemos del
que sabe y mejoramos, es un auténtico fenómeno que pesca allá donde va, solo
tiene el fallo de ser entusiasta acérrimo del Real Madrid y darnos bastante
caña cada vez que puede, pero lo queremos igual.
Apuntada en rojo en el
calendario y deseando que llegase ya ésta hebdómada donde dispondría de varios
días de descanso, el amigo Revi se planificó la jornada de pesca donde fue alternando
días de cebado con días de pesca. Dedicando un día previo a la conveniente y
vital tarea de sondeo, se decantó por un lugar que intuía que sería propicio
para pescarlo y podría darle buenos resultados, contaba con diferentes puntos
donde podía jugar con la profundidad, entre los 5 y 12 metros podía ir probando
y buscar donde estaba más activo el pez, y así dio el pistoletazo de salida a
su jornada de pesca que a continuación desmenuzamos.
MIÉRCOLES;
Estando ya claro el
lugar elegido para pescar y que solo estaba ligeramente cebado cuando estuvo sondeándolo,
el compañero Revi acompañado de Juanan, cargo la tarde del miércoles en el
coche unos cubos de semillas ya cocidas y otro de un revuelto de pellets y
boilies junto con el spomb y se dispuso a dejar la zona a punto para el
siguiente día que sería cuando lo pescaría desde bien temprano, contaban con
unos 20kg de semillas entre maíz y cañamón y unos 4-5kg de la mezcla de boilies
y pellets mencionados, no obstante tuvieron a bien llevarse un par de cañas por
si mientras cebaban sonaba la flauta y entraba algo, finalmente resultó que no
iban a estar mal encaminados.
Prepararon las cañas y
mientras Revi le daba duro al spomb tuvo que depositarlo en el suelo
apresuradamente en varias ocasiones pues se le acumulaba el trabajo, tenía que
estar al quite tanto para el cebado como para clavar las diversas capturas que
tuvo en el par de horas que estuvo a pie de orilla, como aquel que dice aún no
había empezado la jornada de pesca y ya estaba triunfando y disfrutando como un
niño, así da gusto, la moral por lo más alto y deseando que llegara el amanecer
del jueves.
JUEVES;
No tuvo que esperar
mucho para estar de nuevo cargando bártulos en el coche y poniendo rumbo al
charco de nuevo, recién asomaba tímidamente el sol cuando nuestro amigo ya
hacía tiempo que estaba en la orilla con todo el equipo montado, la moqueta en
el suelo y la sacadera más que dispuesta, solo faltaba que las alarmas se
unieran a la fiesta anunciando la primera picada del día, mientras, había que
abrigarse bien pues el tiempo estaba muy latoso y aciago, el color de las nubes
no barruntaba nada bueno. 
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Revi se decantó por
utilizar anzuelos pequeños y curvos y como cebo unos boilies caseros de banana cortesía
del amigo Chato que tan buenos resultados le están dando, boilies elaborados
con harinas de calidad, sin conservantes ni colorantes y con gran cantidad de
semillas que el pez está asimilando muy bien, que estamos testando en múltiples
lugares dejándonos con muy buenas sensaciones, y todo ello acompañado de
nuestras queridas mallas de pva.
Se alzaba la mañana
dando alguna tregua y dejando algún que otro instante falto de lluvia, ya
contaba en su haber con varias capturas de pequeño tamaño cuando recibió la
visita del amigo LuisFer y Ana, lo que sin ninguna duda amenizaba el día, pues
en esta ocasión estaba solo en la orilla, Juanan no pudo acompañarlo al tener
que trabajar. Después de tomar un
bocado y entre animadas charlas la suerte no les dejo de lado y a pesar del mal
día que hacía las capturas se sucedían, no eran de gran tamaño, pero son muy bravos
los peces del lugar y venden cara su derrota lo que hacía disfrutar enormemente
a nuestros amigos, todos tocaron escama que no está nada mal, aquí tenemos
tratándose de hacer con la captura y bajo la supervisión de LuisFer a su
compañera de fatigas Ana, que no solo no quiso cederle la caña a su novio, si
no que se hizo con el pez sin ningún problema y para muestra esta bonita
fotografía, enhorabuena.
Después de comer algo,
de asentar el estómago y calentar el gaznate con un bien recibido café,
tuvieron un par de nuevas picadas que también lograron llevar a la moqueta, finalmente
decidieron que la jornada tocaba a su fin, el frío era ya notable y comenzaba a
llover de nuevo, así que era momento de cebar nuevamente para que el cebadero
no perdiera fuelle y aguantase a los peces por la zona hasta el sábado, día en
el cual Revi volvería a tentarlos y
esperaba seguir con la buena racha, así que se despidieron, se desearon buen
viaje y así bajamos el telón de lo acontecido en este día.
Tras un merecido día de
descanso, bien aprovechado con la familia se acercaba el día de volver
nuevamente a la orilla, la alarma del reloj sonaba bien temprano, en esta
ocasión el compañero Revi compartiría orilla de nuevo con el amigo Juanan, una
vez cargados todos los trastos en el coche pusieron rumbo a la orilla, el día
estaba fresco, el cielo nublado pero no tenía pinta de descargar agua.
Estando el lugar bien
cebado de toda la semana, nuestros compañeros se decantaron en esta ocasión por
solo utilizar mallas de pva, no querían armar mucho jaleo y arriesgarse a
espantar al pez, la zona mostraba bastante actividad y movimiento, en cuanto al
cebo de anzuelo decidieron seguir probando las bolas caseras de banana que
estaban funcionando a las mil maravillas, el flotante de piña y ácido butírico
de carpzone impregnado de su correspondiente remojo que suele darnos muchas
alegrías bajo el montaje que suele ser nuestro favorito cuando utilizamos
pop-ups, al que llamamos por hacer la gracia el winnie de pooh, básicamente
empleando un trozo de termoreducible al que le damos forma curva, junto a un
anzuelo de pata larga y algo curvado y un plomo situado al final del
termoreducible para dejar una presentación perfecta, sin mucha historia ni
complicación, nos encontramos con un montaje muy efectivo a la hora de clavar
al pez, por la forma en la que gira cuando éste absorbe el cebo, montaje muy
recomendable que en ciertas circunstancias será de gran ayuda, por último
también utilizaron otra de las bolas que no nos suele defraudar, la de kiwi y crustáceos,
que si bien es aceptada por las carpas sin problema se muestra casi infalible
cuando hablamos de barbos. 
Con todo listo, era la
hora de lanzar las cañas al agua y esperar la llegada de la primera picada,
dada la actividad perceptible estaba al caer, y vaya que así era, al poco
tiempo Juanan ya estaba clavando un pez mientras Revi corría ligero a por la
sacadera, finalmente lograron hacerse con una carpa carente de gran porte pero
toda una guerrera que hizo que el amigo estuviera un rato luchando hasta
hacerse con ella, empezaba bien la cosa. Después de fotografiarse
con la captura, reponer cebo y lanzar nuevamente la caña, Revi conseguía la réplica
con una nueva picada esta vez en una de sus cañas, alguien no se había podido
resistir a una bola de banana, se trataba de otra carpa de similar tamaño a la
sacada anteriormente que ponía el tanteador en empate a uno, la cosa se ponía
interesante, que grandes los chato’ baits!!!
De
nuevo las cañas en el agua, tocaba almorzar a la par que los compañeros
contemplaban los continuos saltos de los peces en el agua, y como era de
esperar no hizo falta mucho tiempo para que el zumbido del viento se mezclara
con el sonido de una de las alarmas de Revi, nueva picada y nueva captura en la
moqueta, esta vez se trataba de un hermoso barbo que sucumbió a los encantos de
la bola de kiwi y crustáceos, aunque la victoria sobre Juanan no se iba a
alargar mucho en el tiempo, justo en el momento de devolver el pez al agua y
sin haber lanzado aún la caña tuvieron que salir corriendo a una de las cañas
de Juanan, se había producido una picada con una gran arrancada, después de
unos instantes de incertidumbre daba la cara una nueva carpa que restablecía el
empate, seguían las espadas por todo lo alto.
Se acercaba la hora de comer y se daban nuevas picadas de
ejemplares pequeños, que picaban en algunos casos a dos boilies de 20mm cada
uno, ¡¡¡lo que hace el hambre!!!. Varias capturas no pudieron renunciar a
probar la piña y ácido butírico de carpzone, los compañeros se fotografiaban
con los ejemplares, los manipulaban con mimo y cuidado, curaban sus heridas de
guerra y los devolvían al agua.
Así llego la tarde
entre nuevas picadas que rápidamente eran devueltas al agua y otras que se
escapaban por el camino, como la semana había sido completa en pesca y el
cansancio se hacía presente en el cuerpo, a parte que el tiempo ya no
acompañaba y el viento y frío ya comenzaban a ser más que molestos, nuestros amigos
decidieron que no iban a apurar las horas de pesca, ya habían disfrutado más
que suficiente y se agradecería una ducha bien caliente y reposar en el sofá,
así que recogieron todo y se despidieron hasta nuevo aviso, seguro que no
tardaran mucho en volver a intentarlo.
Y eso fue todo lo
sucedido durante éstos días, el amigo Revi se lo paso en grande y disfrutó de
lo lindo de esta pasión por la pesca que recorre su cuerpo y lo llena de vida, importante
recalcar que estuvo muy bien acompañado, es un punto difícil de describir, lo
increíblemente gratificante que resulta poder compartir estos placenteros instantes
de momentánea desconexión que en diferentes momentos resultan tan apetecibles y
necesarios para recargar las pilas. Enhorabuena compañero por esas capturas,
muchas gracias por compartirlo con todos nosotros y espero que no pase mucho
tiempo para que este relator de los hechos pueda disfrutar con usted de una
sesión parecida a las descritas, seguiremos informando de las salidas del
maestro y del resto de compañeros, ¡¡¡¡Y que la quería!!!!………
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