martes, 30 de abril de 2013

¡En la próxima CWR... !

No os podéis perder el próximo número de la revista de Carp Fishing en España, ¡la magnífica CWR!, porque encontraréis artículos tan sensacionales como el que ha realizado nuestro compañero Carmelo sobre uno de los materiales que han revolucionado la pesca, como es el PVA.
 
Esta es la portada del sensacional artíclo que encontraréis en el próximo número de CWR.
¡No os lo perdáis!, no tiene desperdicio.

 

 

domingo, 28 de abril de 2013

ULTIMANDO DETALLES.


Empieza la imparable y deseada cuenta atrás para dar el pistoletazo de salida a otro concurso del club, una nueva reunión entre amigos  con la idea de pasar unos días a pie de orilla de auténtico disfrute y divertimento rodeados de buena gente, con el deseo, voluntad y máximo empeño entretanto de lograr hacernos con algún ejemplar de buen porte, de no darse la fortuna de conseguir tal propósito éste sería el menor de los males, pues la primera parte del plan esa no falla seguro.


Con el fin de intercambiar impresiones sobre el concurso y la forma de proceder de cada uno en él, nos reunimos en el día de ayer unos cuantos compañeros durante unas horas, estábamos terminando una remesa de boilies caseros, haciendo acopio de diversos cebos y cargando en el carro cierto material para ir adelantando trabajo.

Se decidió que no sería mala idea pasar un día de campo mientras se comentaba la jugada, así que nos pusimos en marcha después de tomarnos un café y enseguida llegamos a la orilla, el día estaba con buena temperatura pero con mayor presencia de aire de la deseada, lo que hacía que la sensación térmica fuera más baja, a pesar de ello se montaron los equipos rápidamente.
Tocaba ponerse con los montajes y los cebos, mientras los más rezagados terminaban de montar, una vez más uno de los cebos principales serían nuestras queridas bolas caseras que nos ofrece la buena mano del amigo Chato, como hemos comentado en tantas otras ocasiones son bolas testadas en infinidad de lugares con muy buenos resultados, totalmente naturales y poseedoras de gran calidad, nutrientes y semillas, aunque utilizamos otros muchos cebos siempre las tenemos presentes, no solo por su citada calidad o el amplio abanico de sabores disponibles, el precio que tienen es un atrayente más que en estos tiempos que corren no es ninguna tontería, como siempre resulta mejor probar y sacar conclusiones propias que solo tener referencias ajenas, cualquiera que quiera probar éstas bolas y sus correspondientes remojos no tiene más que ponerse en contacto con el compañero Chato que gustosamente explicará todo aquello que sea preciso, estoy convencido que estas bolas no os decepcionaran si les dais una oportunidad.


Para la jornada utilizaríamos diferentes micropellets para cebar, la pesca está de nuevo activa, se mueve mucho más que meses atrás y queríamos atraerla rápidamente, los acompañaríamos de pienso para perro y algunos tacos para las ovejas, cebos proporcionados en gran cantidad y a un módico precio lo que agradece enormemente él bolsillo, sin duda son de gran utilidad y totalmente recomendables.


También preparamos diferentes mallas de pva para tener buena reserva para el concurso y cogimos unas cuentas para utilizarlas en esta sesión, pues nos encanta que nuestros bajos vayan acompañados de su correspondiente malla.


 
Para el cebo de anzuelo se usaron bolas caseras, estábamos probando unos sabores nuevos y queríamos ver la aceptación del pez y seguir sacando conclusiones, no solo para ver cuáles son las más efectivas en mayor número de lugares, también para cambiar cosas, para aumentar, disminuir o eliminar la presencia de ingredientes.



Como los pellets tampoco nos han funcionado mal, era otro cebo que se utilizaría, también son caseros y de diferentes aromas, a lo largo del día fuimos cambiando los sabores para ver por cuales se decantaban los peces del lugar.

Llegados a este punto solo faltaba lanzar las cañas al agua, con ayuda de los barcos cebadores lo hicimos en un rato, sondeamos la zona, escogimos los puntos que considerábamos más adecuados y depositamos en ellos nuestros montajes y algo de cebo por los alrededores para después esperar las posibles picadas. Que contento estaba nuestro amigo Chato con su barco recién tuneado, solo tiene el fallo de la bandera, pero nadie es perfecto.......



Mientras nos encargábamos de todo, nuestro Arguiñano particular se centraba en lo que mejor se le da, nosotros cebamos a los peces y él a nosotros, el Capi estaba rematando los últimos detalles culinarios, después del madrugón y pasadas varias horas era el momento idóneo para tomar un bocado, un delicioso moje y un plato de carne en tomate nos esperaban en la mesa.
Era un aperitivo mientras se terminaban de hacer unas riquísimas patatas con pimiento y huevos estrellados, como se estaba poniendo la mañana, vaya forma de pasarlo mal, en un momento desaparecieron los víveres y los platos quedaron impolutos.

Como no todo va a ser comer, hasta de vez en cuando se pesca en este club aunque parezca mentira, cada poco tiempo se sucedían picadas de ejemplares de muy poca talla, pequeños gatos y carpas que ocupaban menos que nuestras propias manos lo que hacía complicado poder hacer fotografías, aunque también teníamos la fortuna de lograr alguna pieza de mayor calibre y que daba una foto más que bonita, aquí vemos al amigo Javi posando encantado con un magnífico barbo, no podemos dejar de mencionar lo batalladores que son los peces del lugar.
A lo largo del día fuimos cambiando nuestros cebos y montajes con la intención de abarcar el mayor número de ellos y sacar conclusiones, como ya estábamos obteniendo picadas buscábamos algo más que nos pudiera ser de utilidad en otros momentos.

Por ellos los compañeros reponían o remplazaban sus cebos, siempre acompañados de nuestras queridas mallas de pva que son un complemento ideal y un gran atrayente que puede facilitarnos enormemente las cosas y aumentar nuestra probabilidad de obtener nuevas picadas.
 
Después de soportar momentos de aire muy incomodos, tocaba respirar ligeramente pues apretaba el sol, se empezaba a estar muy a gusto, fue el momento perfecto para degustar un fresquito Ajoblanco a media tarde que te deja como nuevo, algunos compañeros tuvieron que echar mano para hacer hueco  de un peso pesado de las sesiones, el Almax, en el horizonte quedaban nuestras apreciadas gachas para dar por finalizada la sesión y el personal no estaba por la labor de no probarlas.


 Fue entre diversas charlas sobre el devenir del  inminente concurso cuando seguíamos obteniendo capturas, algunas de ellas se lograban desanzuelar por él camino y otras llegaban a buen puerto hasta la moqueta, eran en su mayoría piezas pequeñas y otras diminutas, pero estábamos disfrutando como siempre y algunas veces salían barbos de buen porte, como el que capturaba Miguel y mostraba orgulloso, enhorabuena compañero, ¡¡¡Mhhh Ouhhh Yeahhh!!!.


No dejábamos de recebar la zona para mantener el cebadero lo más activo posible, con la ayuda del barco cebador en algunas ocasiones y otras del cobra, también teníamos que comprobar los cebos con cierta frecuencia pues continuos toques en las cañas hacían que algunos cebos no durasen mucho tiempo en el anzuelo.

Sin novedades en el frente y continuando con la misma tónica de todo el día, se aproximaba el final de la tarde y la hora de marchar, ya estaban las gachas en el fuego y casi terminadas cuando tuvimos la que sería la antepenúltima captura del día y la última con un buen peso, fue el amigo Chato el que llevo a la moqueta con ayuda de Miguel a este precioso ejemplar, un bravo sano y batallador que plantó cara e hizo disfrutar enormemente a nuestro compañero, había sucumbido a una de sus bolas caseras con un tope de maíz lo que sin lugar a dudas aumentaba su satisfacción, poco después perdimos una pieza que parecía de buen tamaño e intuíamos que se trataba de un Channel Catfish, por la forma de producirse la picada, el cebo de la caña y la lucha con el pez, pero lamentablemente no pudimos hacernos con la pieza, tendrá que ser en otra ocasión, Nos despediríamos con una última captura, una pequeña carpa, recogimos todo el equipo y pusimos rumbo a casa, fueron unas horas magnificas rodeado de buenos amigos donde la pesca hace mucho que se convirtió en algo secundario, dentro de pocos días disfrutaremos de varios días a pie de orilla y seguro que lo pasamos de escándalo, esperando ansioso ya a que llegue ese día.



En ésta ocasión también pudimos grabar algún que otro vídeo, un ejemplo sería una picada en directo del amigo chato sacando un precioso barbo;






Corrimos en otro instante apresurados ante una nueva picada que resultó fallida y dejó alguna que otra risa floja;



Finalmente quería mostraros alguna de las penalidades que pasamos a pie de orilla, aguantamos porque somos tipos duros pero en ciertos momentos se hace muy complicado xD, ya la siguiente parada será en el concurso, os emplazamos para dentro de unos días para compartir con todos vosotros lo acontecido en su transcurso, hasta la próxima….


miércoles, 24 de abril de 2013

NUEVA JORNADA DE PESCA…..


En apenas una semana y si no sucede alguna catástrofe, cruzamos raudos los dedos, tendrá lugar el segundo concurso del club en lo que va de año, que mejor excusa estos días previos que proponer bajo el ánimo de supervisar equipo, probar cebos, realizar acopio de montajes, nuevas sesiones de pesca. Como llevamos alguna que otra jornada con su correspondiente cúmulo de kilómetros a las espaldas en las últimas semanas, decidimos el Capi y un servidor que para esta salida no nos desplazaríamos muy lejos y tentaríamos a los peces de la zona durante unas horas, el guerrillero Scooby también tendría a bien apuntarse, éramos sabedores que las capturas no supondrían la consecución de un nuevo records personal, pero en muchas ocasiones apetece tener una sesión de disfrute con múltiples capturas aunque no sean de un tamaño considerable (parece que solo hay que salir a pescar si vamos en busca de ejemplares de más de 15 kilos), y ésta era una de ellas.


Elegido el puesto el día de antes previo pateo de orilla y ojeo de la zona, decidimos que tocaría madrugar para asegurar el sitio, daba la circunstancia que el lugar no tenía muy buenos puntos para estar cómodos y buscar parapetarse del poderoso sol que nos rondaría buena parte del día, la orilla estaba muy limitada debido al enorme caudal de agua acumulado por las pasadas lluvias, con zonas inundadas y orillas con gran maleza no había muchas opciones.


 Aún no había amanecido cuando ya estábamos comprobando la temperatura del agua e intentando percibir signos de actividad en ella. Rápidamente pusimos a trabajar al barco cebador que a base de viajes cebó la zona previamente sondeada en un periquete, contábamos con profundidades comprendidas entre los 4 y 8 metros que fuimos probando para saber en cuál se movía mejor el pez, para el grueso del cebado nos decantamos por productos que se deshacen rápidamente y que trabajan enseguida que entran en contacto con el agua, por ello preparamos un cubo con una mezcla de frolic’s y pellets de diferentes tamaños y aromas para jugar con los tiempos de disolución, añadimos algo de semilla, boilies troceados y pequeños tacos normales de vaca y otros de leche.  
Terminada la tarea tocaba montar trípodes y cañas y colocarles los montajes ya preparados instantes antes, para seguidamente lanzarlos al agua y esperar a que aconteciera alguna picada. Para el cebo de anzuelo decidimos seguir probando las bolas caseras del amigo Chato que son una maravilla, unas bolas totalmente naturales y colmadas de semillas, a nuestra disposición un amplio abanico de posibilidades donde elegir, entre otros, cangrejo, pescado, piña y cangrejo, banana, mantequilla, coco, también quisimos probar con la Piña y Ácido Butírico de Carpzone, el Frolic y el M1 de SBS, según los resultados así obraríamos de una forma u otra.



 El día estaba soleado y despejado pero se levantó un aire fresco que sentado en la silla te dejaba aterido, pasaban los minutos y a pesar de los continuos saltos los peces no tomaban nuestros cebos, fue sin echar cuentas y atendiendo otros menesteres cuando una de las alarmas se arrancó a sonar,  la concomitancia de varios infortunios casi provoca la pérdida de la pieza por incomparecencia, pero finalmente pudimos llegar a la caña y hacernos con ella, a pesar del tirón inicial se trataba de un ejemplar de pequeño tamaño. Tuvimos que esperar un buen rato para apuntar la segunda captura en nuestro casillero, el zumbido del  insistente y por momentos molesto viento se mezcló con el sonido de una alarma, otra carpa de similares características a la anterior llegó a la moqueta.



Se acercaba la hora de almorzar y a la llamada del Capi Scooby enseguida se apresuró a llegar a la mesa para estar muy atento al menú, podía elegir entre unos filetes de lomo, una tortilla de cebolla o unas tiras de beicon, en cuanto a picadas de peces seguíamos sin novedades, así que nos tocó picar a nosotros que tampoco nos disgusta la idea.


Mientras terminábamos el bocado a nuestras espaldas los saltos se sucedían sin descanso, el embalse rebosaba vida por todos los costados, el pez estaba a lo que estaba y no prestaba gran atención a nuestros cebos, estaban demasiado reticentes, aunque no caíamos en el desánimo y seguíamos intentándolo y recebando para llamar su atención.



Se aproximaba el mediodía y a pesar de los múltiples intentos no conseguíamos nuevas capturas, habíamos probado con diferentes cebos y montajes y nada de nada, decidimos pues quemar el último cartucho y utilizar un cebo universal y más que aceptado por el pez de la zona, hablamos del maíz, sacamos las cañas y utilizamos este efectivo grano, en una de las cañas mantuvimos la bola de cangrejo casera que había dado las picadas obtenidas hasta el momento,  la acompañamos de unos cuantos boilies troceados con el cutter.


Mientras cambiábamos el cebo de nuestras cañas con diferentes ristras de maíz de variados aromas, fresa, vainilla tuti etc, preparamos también unas cuantas bolas de engodo para esparcir por el cebadero con la intención de crear una respuesta positiva del pez hacia nuestros cebos y tentarlos a hacerlos venir, para el maíz también empleamos los polvos 3 en 1 de SBS para potenciar el cebo y dotarlo de mayor color y un atrayente desprendimiento de partículas olorosas.


Llegados a éste punto, solo quedaba esperar a que funcionase la jugada y cambiase la situación, de repente y no habiendo pasado mucho tiempo una de las alarmas nos indicó la existencia de una nueva picada, el Capi corrido hacia las cañas para clavar el pez y hacerse con la pieza, la casualidad hizo que la picada se produjese en la caña que estaba rodeada de obstáculos y mucha maleza, como buenamente pudo hizo gala de un increíble efugio para salir con éxito del apuro y sortear los atranques, resuelta la contingencia acercó el pez hasta la sacadera, se trataba una vez más de una pequeña carpa que dio toda la guerra que pudo y nosotros que se lo agradecemos, una vez curada de nuevo al agua, sin tiempo para reponer el cebo de la caña tuvimos otra picada que logre clavar y llevar hasta la orilla, otra carpa más, en pocos minutos habíamos igualado lo vivido durante la mañana.


Una vez repuestos los cebos y las cañas nuevamente lanzadas al agua tocaba refrescarse, el sol estaba atizando de lo lindo y el aire disminuyó considerablemente, fue cuando aprovechamos para degustar un espléndido Ajoblanco que en días de altas temperaturas sienta de muerte.



Una vez recuperadas las fuerzas continuamos atendiendo nuevas picadas, algunas de ellas lograban zafarse y escapar, otras en cambio conseguíamos hacerlas llegar hasta la sacadera e ir incrementando nuestro número de capturas, ya sí que podíamos decir con motivo y razón que el cambio de cebo había sido acertado y estaba dando sus frutos.


La tarde empezaba a animarse pues las capturas se sucedían, en ocasiones  eran tan consecutivas que en varios momentos tuvimos varias cañas fuera al mismo tiempo, lo que se nos resistía era la fotografía con un ejemplar de mayor peso, pero no perdíamos las esperanzas pues haberlas haylas.


Había mucho movimiento por la zona, pequeños peces removiéndose por la orilla, pájaros revoloteando por los alrededores, los mosquitos infatigables en busca de su botín y las carpas seguían a lo suyo con sus saltos, sin quererlo mientras estaba con la cámara en la mano inmortalizando el paisaje, caí en el detalle revisando la fotografía hecha, que había capturado el momento de comienzo de un salto y asomaba del agua medio cuerpo de una carpa, sin duda una estampa tan curiosa como fortuita.


La tarde seguía dándonos capturas tras capturas y el barco proseguía acumulando viajes y gastando baterías, el maíz se mantenía como cebo triunfador untado en su polvo que tan buen color estaba aportando al agua en el trascurso de su recorrido hasta llegar a los puntos grabados donde estaban lanzadas nuestras cañas.


Mientras nos entreteníamos comiendo unas pipas y disfrutando del día, sacamos las que serían a posteriori las dos últimas capturas de la jornada, a pesar de quedar un par de horas hasta que se ocultase el sol no logramos tener más picadas, se levantó nuevamente el aire frío que tuvimos en la mañana y el pez se desactivó notablemente, viendo la falta de picadas y como se estaba poniendo la situación con el aire de cara sabíamos que no tardaríamos en recoger.

Paulatinamente el paisaje se tornaba más oscuro, seguíamos sin picadas y con el incómodo aire, definitivamente habíamos agotado la tarde y muy pronto caería sobre nosotros la noche por lo que comenzamos a recoger parte del equipo aguantando solamente las cañas en pro de una de esas picadas de última hora, no tuvimos la fortuna de que se produjera pero el día se había dado bastante aceptable y habíamos pasado un buen rato, así que en esta ocasión la moneda se volcó del lado de la cara y nos fuimos con un muy buen sabor de boca, hace mucho tiempo que no contábamos con la falta del bullicio de más compañero en una sesión y se hizo extraño por momentos tanta tranquilidad, sosiego y apaciguamiento, pero se disfrutó al máximo y hay tiempo para todo. No quería terminar sin mostraros un pequeño vídeo que grabe, como sabéis estamos en pleno momento de la freza o desove, el acto de verter los huevos y esperma por los peces y anfibios en su ambiente, son instantes de mucho movimiento en el agua y gran cantidad de saltos, si te sientas y observas durante un instante se puede apreciar el constante movimiento en el agua, como se frotan en la superficie y sobresalen los cuerpos de los peces a la par que se producen una enorme cantidad de saltos, pues en plena jornada de pesca es de lo que pude disfrutar y quería compartirlo con vosotros en estos pequeños vídeos, saludos y hasta la próxima…..







Si no veis el vídeo con mucha nitidez, podéis verlo algo mejor aquí;