lunes, 22 de abril de 2013

MIGUELIN RETURN….


Ya tenemos una nueva salida del pequeño del club, cada día le va gustando más esto de la pesca e intenta sacar el máximo tiempo libre posible para dedicar a tal fin, el pasado Sábado decidió ir con la familia a tentar a los peces del lugar, en estos días la actividad es notoria y se ha incrementado considerablemente, lo que hace que las picadas se sucedan y pueda deleitarse uno de un fantástico día haciendo algo que tanto le gusta.

Cargados los trastos en el coche pusieron rumbo a la orilla con el propósito de pasar unas cuantas horas disfrutando de la naturaleza y un deporte que les entusiasma, el día estaba despejado y el sol se empezaba a hacer notar a pesar de ser temprano aún, enseguida comenzaron a montar todas las cañas para comenzar a la jornada lo antes posible, contaban con un fondo limpio de obstáculos y atranques, con una profundidad de unos 3’5 metros, la actividad del pez y los continuos saltos que se producían no hacían más que acelerar el proceso de preparación de los equipos por parte de nuestros amigos, deseosos ya de lanzar las cañas al agua y esperar con gran ilusión la llegada de las primeras picadas del día.

Se dispusieron a cebar un poco la zona, el maíz fue el cebo predilecto, con ayuda del tirachinas se cebó los diferentes puestos que albergaban el cebadero, y cada cierto tiempo se recebaba para que siempre estuviera la zona con alimento, se utilizó también algo de engodo y unas bolas lanzadas con el cobra cada cierto tiempo para mantener el cebadero activo, en cuanto al cebo de anzuelo el mencionado maíz era uno de los protagonistas principales, acompañado de la siempre efectiva lombriz o los ya celebres y más que nombrados boilies caseros de nuestro amigo Chato que tan buen resultado nos dan allá por donde vamos, los de cangrejo y los de piña fueron los que se probaron en ésta sesión.


No tuvieron que esperar mucho para empezar a dar uso a la sacadera y moqueta, la pesca menuda estaba muy revoltosa y removiéndose por todas las zonas y enseguida comenzaron a tomar los engaños de nuestros amigos, poco a poco fueron trayendo a la orilla diferentes ejemplares de carpas pequeñas, pero que con picadas tan consecutivas en el tiempo los estaban haciendo disfrutar de lo lindo.

Cada poco tiempo tenían que salir corriendo hacia las cañas ante la avalancha de picadas que se daban, algunas se escapaban y no lograban clavarse bien pero la mayoría tras una bonita lucha llegaban a la sacadera y nuestros amigos seguían apuntando nuevas capturas en sus casilleros buscando un pique saco en busca del ganador de la sesión, los cebos elegidos sin duda estaban dando buenos resultados, habían acertado de lleno en la elección de los mismos.


 Apenas había tiempo para relajarse tomando un bocado y un refresco cuando ya tenían que estar nuevamente pendientes de las cañas para hacerse con los peces que picaban, reponer los cebos y volver a lanzar las cañas, todos estaban disfrutando a más no poder, desde el más grande hasta el más pequeño, aquí ninguno se quedaba sin sacar peces, y la cosa estaba reñida, no había un ganador claro con cierta ventaja holgada, las espadas estaban en todo lo alto y había que estar pendiente tanto de las cañas propias como de las del vecino.



El día estaba siendo de lo más productivo, casi sin darse cuenta nuestros amigos se habían despedido de la mañana, ya habían comido y afrontaban las últimas horas antes de regresar a casa, en un primer momento la idea era recoger justo después de comer, pero viendo lo bien que se estaba dando la cosa decidieron prolongar la estancia un poco más.




Tras un breve periodo de reducirse la actividad del pez, volvieron a producirse las picadas y lograron incrementar el número de ellas obtenidas hasta el momento, habían redondeado un día estupendo, todos se iban contentos a casa y deseando de repetir tan pronto como les sea posible, así da gusto salir al campo.


Y así llegó la hora de recoger y dar por finalizada la sesión, habían sido unas cuantas horas de frenética actividad del pez y muchas picadas, los ejemplares eran muy similares en cuanto al peso, a pesar de haberlas no se logró la captura de un ejemplar mayor, pero seguro que en la próxima salida saldrá alguno, enhorabuena a Miguelin por la estupenda sesión que se pegó, por el buen trato a las piezas y por inculcar todo ello a los más pequeños, que en sus comienzos ya van contando con un buen maestro para resolverles las dudas que surgen sobre la marcha y para crear en ellos cada día mayores ganas de practicar este increíble y sano deporte, esperamos ya tu siguiente salida, hasta la próxima………


No hay comentarios:

Publicar un comentario